Después de probar la fuente de alimentación en otro ordenador, vuelvo a montar mi equipo y dejarlo como estaba, y como cada día enciendo el ordenador, esperando a la lenta espera de arranque del sistema operativo, pero cual es mi sorpresa, cuando, después de encenderlo y oír como se pone en marcha, la pantalla sigue en negro sin detectar una señal -!Vamos! ¿ya he conectado algo mal?- pienso, como todo usuario que tenga un ordenador hago las típicas comprobaciones, ¿no habré conectado bien el cable dvi? ¿me ha faltado algún cable por conectar de la fuente a la placa? esto último es imposible porqué antes de encender nada es lo primero que reviso para que luego, literalmente, nada me huela a chamusquina. Vuelvo a encenderlo, vaya, sigue sin ir, tras otra media hora o una hora (en esos momentos de "tensión informática" suelo perder la noción del tiempo) de pruebas y re-apagados del ordenador, me doy por vencido, ya que ni siquiera responde el teclado y el ratón, debe ser cosa de la placa, ¿me la he cargado? Decido no preocuparme mas, si no va, no va, pero coger estrés por algo ya con poca solución, es en vano.
Decido llevarlo al día siguiente a la tienda de informática donde lo adquirí, ya que aún lo tengo en garantía, mientras me dirijo hacia allí, me llegan los buenos recuerdos de esa tienda, como por ejemplo, los dos meses de espera para que me lo arreglaran una vez y que después de dármelo lleno de polvo (dos meses muerto del asco en una estantería dan para mucho) mas que arreglármelo me lo empeoran, destrozándome un disco duro y una tarjeta wifi usb, que había conectado al frontal, y no sé ni como, se me quemó. Bueno, pues llevándolo a esa misma tienda, e intentando acordarme de algún dios benevolente para rezarle cualquier cosa con tal de no repetir aquella experiencia lo dejé en la tienda de "informática" (no puedo evitar ponerle comillas).
Ya tenía preparado mi viejo ordenador en casa, un cacharro de hace 5 años, pero que siempre viene muy bien en este caso de apuros, de eso hace 2 días.
Hoy miércoles, a no estar acostumbrado ya a la lentitud de un procesador y una ram ya obsoletas en el mercado, decido jugar un poco con el, y le instalo windows 7, que tengo que decir, que las primeras impresiones han sido bastante buenas, después de actualizarlo y prepararlo como equipo de apoyo (msn, spotify, chrome, jdownloader) y habiendo visto de antes un aviso de temperatura alta del procesador (si, reconozco que polvo tenía, después de tanto tiempo sin usar) decido limpiarl el ventilador y ponerle nueva pasta térmica al procesador, una vez vuelto a montar, vuelvo a conectar todo, -Espero que este encienda no como el otro- pienso de forma pesimista como casi siempre hago, y... !voila! dicho y echo, el ordenador, empieza a hacer lo mismo que el que he llevado a reparar hace dos días, -no te pongas nervioso, tiene que ser una broma- sigo pensando, pero no, todo indica (con los mismos síntomas) que la historia se vuelve a repetir. Incrédulo de lo que veía, me pongo a pensar, que narices estaba pasando, esta vez, ni siquiera había tocado la fuente de alimentación, de repente, me viene a la mente una conversación que mantengo a veces con mi padre, la alta tensión de la corriente en la casa, cada dos por tres, no dejan de darnos calambrazos por tocar alguna parte metálica de cualquier electrodoméstico conectado a la corriente, y eso, no es normal, teniendo conectado lo que puede llegar a tener una familia de dos personas cualquiera, sigo pensando y desde hacía un par de semanas tenía una regleta nueva en mi habitación, la otra, de no se porqué, estaba dando problemas, ¿porqué factor puede haberme pasado esto? ¿puede ser una mezcla de los dos? para eso me parece que tengo que esperar a la llamada de esa tienda de "informática" para ver si la respuesta que me dan puede contrastar con la mía, lo único que puede llegar a consolarme, es que la culpa no ha sido mía y una vez mas se llega a ver que la profesionalidad....(el problema de la alta tensión es de una mala instalación que nos hicieron) no existe.